Asimismo, hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios que se ha dado a las iglesias de Macedonia, porque, en las grandes tribulaciones con que han sido probadas, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad. Doy testimonio de que con agrado han dado conforme a sus fuerzas, y aun más allá de sus fuerzas, pidiéndonos con muchos ruegos que les concediéramos el privilegio de participar en este servicio para los santos.
2 Corintios 8:1-4.
Sus manos templaban al poner dentro de mi bolsillo el arrugado billete. “Es para misiones”, me dijo casi al oído. Recordé que aquel anciano sólo recibía mensualmente 18,00 dólares como pensión, y de eso él ya había dado el diezmo.
Lo siento, pero no puedo tomar ese dinero — le dije—, yo sé que usted tiene muy poco para sus propios gastos.
Sus ojos me miraron con fijeza y con severidad cuando me dijo: — Pastor ¿sólo porque soy pobre va usted a negarme el privilegio de dar para una causa que amo tanto? —W. E. Grindstaff.
Paz y Gracia
🔥❤️✝️🌍
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.